Producción Sostenible de papel: Bosques Sostenibles para el Mañana
El papel que tienes en tus manos proviene de un árbol talado en un bosque europeo en los últimos dos años. Parece algo malo, ¿cierto?
Error. ¿Y si alguien te dijera que talar árboles y fabricar papel de esta forma puede ser bueno para los bosques? Se trataría de greenwashing —o «lavado de imagen verde», en referencia a las prácticas publicitarias que pretenden ser virtuosas en términos ecológicos—, ¿verdad? Pues, en realidad no, otro error.
Te explicamos el porqué…
Hoy en día, todos entendemos la vital importancia de que haya bosques sanos y abundantes para garantizar un futuro sostenible para nuestro planeta. Los bosques de todo el mundo actúan como «sumideros de carbono», puesto que absorben 7.600 millones de toneladas de CO2 al año —es decir, alrededor de una vez y media la cantidad de dióxido de carbono que emite EE. UU. cada año—.
Gestionar de manera sostenible las zonas de bosques no solo significa favorecer diversos ecosistemas —donde los árboles crecen en un suelo en buenas condiciones, junto con más flora, fauna y hongos — sino también mantener esos sumideros de carbono tan importantes y, por ende, contribuir a la esencial tarea de mitigar el cambio climático.
Cuando esos bosques proporcionan fibra de madera a fabricantes de papel como Sappi, la colaboración que existe detrás permite favorecer el buen estado y el crecimiento de esos bosques, además de unir a las empresas en una misión común para la creación de una economía circular de base biológica.
Nada mal, ¿verdad? Pero, ¿qué significa?
Una economía circular de base biológica empieza desde lo más simple reducir los desechos, reutilizar materiales cada vez que se pueda y reciclar los recursos.
En Europa, las tasas de reciclaje de papel ya se acercan al 75%. Mientras tanto, el propio sector del papel tiene como pilar recurrir a clareos forestales y residuos de aserraderos como fuentes para su fibra de madera.
La transición hacia una economía circular de base biológica también implica optar por un sistema centrado en regenerar los sistemas naturales, reducir los residuos y la contaminación, así como conservar durante más tiempo los productos y materiales actualmente en uso.
El sector del papel ya está trabajando duro para regenerar los sistemas naturales (bosques bien gestionados) y conservar productos y materiales en uso (reciclaje), pero no debe descuidarse la reducción de los residuos y de la contaminación.
Por esta razón empresas líderes del sector como Sappi están invirtiendo de manera coherente y sostenible en innovación y evolución industriales.
Por ejemplo, en su principal fábrica de papel de Gratkorn en Austria, Sappi está invirtiendo millones de euros para modernizar la generación de energía, sustituir los combustibles fósiles por ejemplo por biomasa para alimentar calderas multicombustible; todo ello con un objetivo a corto plazo de conseguir una reducción del 25% de los gases de efecto invernadero en 2025.
Mientras tanto, los residuos electrónicos siguen generando titulares de prensa por constituir el flujo de desechos de más rápido crecimiento del mundo. Además, el uso de electricidad en el ámbito de la informática y de las comunicaciones —desde los smartphones hasta la base de datos que facilita tu dirección de correo electrónico al mejor postor— se prevé que supere el 20% del total mundial cuando un niño nacido hoy alcance la adolescencia.
Y en un rincón de Europa, el consumo de energía se ha disparado a causa del rápido crecimiento de los grandes centros de datos que albergan la «nube»: los centros de datos ya devoran más del 15% de toda la energía generada en Irlanda que se ve por lo tanto en dificultad a la hora de cumplir con sus objetivos de sostenibilidad.
3 razones por las que la impresión es importante para un futuro sostenible
1. Alrededor del 80% de la deforestación global se debe al mayor uso de la tierra para la agricultura y la ganadería. Mientras tanto, los bosques en Europa están creciendo más de 600 millones de metros cúbicos cada año.
2. La mayor parte del sector del papel en Europa sigue rigurosos procedimientos de certificación para abastecerse de fibra de madera desde bosques bien gestionados. Los sistemas de certificación forestal, como de los Programme for the Endorsement of Forest Certification (PEFC), facilitan el rastreo del material certificado a partir del bosque a lo largo de los procesos de producción.
3. Empresas como Sappi hacen todo lo posible por abastecerse de fibra de madera de los bosques en proximidad de sus plantas de producción, por lo que limitan las emisiones de carbono relacionadas con el transporte. En el caso de la fábrica de papel Ehingen de Sappi en Alemania, por ejemplo, el 96% de la madera para pasta de papel y las astillas de madera de haya, fresno y abeto procede de la propia Alemania.